Inicio
@Comun
primavera de solter@s
Por Javier Carlo
Foto de: Alberto Uc.
Fecha de publicación: 22 de marzo de 2012
Aunque a esta altura de la vida los treintañeros ya han pasado bien que mal por varias relaciones –algunos han estado casados, vivido con alguien o tienen un hijo–, este tipo de solteros adultos no quita el dedo del renglón de tener una relación ‘estable’, no obstante sin perder los márgenes de libertad que hasta ahora han ganado.
Mañosamente, los treintañeros se han vuelto fuertes en el manejo de su diálogo interno (que en efecto, es la base de una comunicación sana), al punto de poder ‘engañarse a sí mismos’ y pensar que aún es posible vivir una relación rosa, prototípica y socialmente adecuada, tal como lo pretendían a los veinte y pico (lo mismo mujeres que hombres); es así que a la menor provocación, encontrarán el pretexto para salir a buscarla, esta vez más guapos, más curtidos y más solventes, y la primavera por supuesto, no es la excepción.
Pero lo que también es cierto a esta altura de la vida (y ofrezco una disculpa por adelantado) es que esa relación diáfana ya no existe, y no existe porque los treintañeros se encuentran atestados de una serie de vicios que bien vale la pena reconsiderar, si es que se quiere superar ese letargo de inestabilidad afectiva.
A diferencia de otras largas listas de pretextos por las cuales sería preferible quedarse soltero, mi intención es desenmarañar algunas áreas de oportunidad que bien trabajadas le permitirían a un joven adulto entablar una relación efectiva y por qué no, hasta feliz. Incluso esta primavera.
En mi opinión, es cosa de superar los siguientes vicios.
1. Un treintañero trata de manifestar su grado de independencia, no sólo porque le preocupe demostrarlo, sino para probar que lo ha hecho muy bien (en todos los aspectos). En este sentido, el mensaje no reafirma tanto la capacidad que tiene de valerse por sí solo(a), pero sí su individualismo y nivel de competitividad, de tal forma que nadie que se le plante enfrente podrá superarlo(a). Lo cual es incongruente con un proyecto de relación.
2. El treintañero se muestra como dueño absoluto de su tiempo, sus espacios y sus actividades, y no está dispuesto a modificar tales dinámicas. Este tipo de rigidez, más que reflejar un modo de organización (de entrada loable), proyecta por un lado, la poca disposición que tiene la persona de compartir algo con otra (sea lo que sea); por el otro, cierta fragilidad de su mundo, en tanto que este podría desmoronarse con sólo mover un ápice. Esto es, falta de cesión (sino egoísmo) e inseguridad.
3. En contraparte, el treintañero demanda atención y jerarquía, es decir, que la otra persona sí sea capaz de modificar –incluso abandonar– sus propias dinámicas y priorizar la relación, con tal de demostrar su afecto, de lo contrario, ‘no estaría funcionando’. Exigir esto ya no implica una cuestión de egoísmo o de inseguridad, representa –con todo– una franca falta de respeto hacia la autonomía y la voluntad del otro, lo que es totalmente inadmisible.
4. Resultado de los vicios anteriores y de la fase de enamoramiento, los treintañeros suelen ver una relación como la fusión total de sus individualidades, más que como un espacio de interacción y complementariedad, en tanto que hacen y comparten ‘todo absolutamente todo’ juntos, y no es posible hacerlo de otra manera. Para muchos, esa relación es la cura a todos sus males y están dispuestos a aceptar cualquier circunstancia con tal de tenerla, subyugando la convivencia a un estire y afloje donde prevalecen la dependencia, la rivalidad, el berrinche, el chantaje, la posesión y el drama –sólo por nombrar algunos demonios–, hasta que el vínculo finalmente se rompe (desde luego nada bien).
5. Una vez que la fase de enamoramiento concluye, que la madurez se impone y la pareja se ve realmente como es (en todas sus dimensiones), no todos los treintañeros son capaces de desestereotipar la relación y establecer los acuerdos pertinentes que les permitan salir a flote, los cuales exigen muchas veces el cuestionamiento de los preceptos sociales, las prácticas comunes, los valores de la pareja e incluso de algunos tabúes que bien podrían sanear la relación, tales como el rol de género, la dinámica flexible, la constancia sexual, la validez de los lazos y las preferencias de ambos.
No es que con este punto reafirme el mito sobre la imposibilidad de tener una relación hoy día –para nada–, sólo digo que para tenerla es preciso definir nuevos esquemas de convivencia.
6. Los treintañeros quizá más por costumbre que por resolución propia, pocas veces prevén (y aceptan) que una relación pueda llegar a su fin y que esta terminación sea una fase lógica del proceso de enamoramiento; así que en vez de ‘tirarse al drama’, lo mejor sería recapitular aquello que ha sido constructivo con la otra persona y cerrar con madurez, comprendiendo las razones del término (sin que necesariamente se aprueben). No hacerlo implica –por lo general– saltar de relación en relación, en un círculo vicioso donde se adolece de una serie de frustraciones que nunca han sido resueltas y que seguramente habrán de coartar el siguiente intento.
En definitiva, no existen relaciones para toda la vida, pero la vida que se le inyecte a una relación, el tiempo que dure, puede retribuir con creces la experiencia y el crecimiento de una persona. Ahora sí, sabiendo esto, salgan treintañeros cada vez más guapos, más curtidos y más solventes a buscar una relación, ¡al cabo que ya es primavera!
El que escribe –por cierto– también es de esos solteros.
Contacto:
jcarlomena@gmail.com
Facebook: Javier Carlo
Twitter: javocarlo
Anteriores
NUEVAS TECNOLOGÍAS Y DESAFÍOS AL UMBRAL DEL SIGLO XXI. ACCESO, CONTENIDO Y FORMACIÓN
nuevos modelos y recursos tecnolÓgicos en la prÁctica docente
nÓmada de nuevo. sin que sea necesario dar un paso
diseÑador y avance tecnolÓgico
manifesto
USOS Y ÁMBITOS DE LAS REDES SOCIALES
VALORES Y TECNOLOGÍA EN PASARELA
CARENCIA DE LÍMITES
Bicentenario y pertenencia. ¿Los mexicanos sentimos un proyecto de naciÓn?
Tlatelolco
Otra cara
RANKING DE HERRAMIENTAS EN LÍNEA
CAMBIOS EN LAS RELACIONES UNIVERSITARIAS
UN COMUNICÓLOGO
Un toque italiano
–primera parte- -segundA parte- -TERCERA PARTE--CUARTA PARTe-
gesTIÓN DE CAPITAL HUMANO Y DESARROLLO DE PROYECTOS DE PRODUCCIÓN
USO DE DISPOSITIVOS MÓVILES Y SEXUALIDAD EN JÓVENES ADULTOS
TREINTAÑEROS EN CRISIS
JUGUETES PARA TREINTAÑEROS
WATCH OUT: USTED TIENE UN TWEEN
¿QUÉ ESCRIBIR?
UN AÑO EN COMÚN
ESTRATEGIA GLOBAL: TAREA PENDIENTE
¿COMUNICACIÓN DE TRIPLE HÉLICE?
REDES SOCIALES Y POSICIONAMIENTO
EL REFRITO COMO FORMATO TELEVISIVO
MÉXICO PATRIOTA
RT @COMÚN. RT / USOS Y ÁMBITOS DE LAS REDES SOCIALES
RT / NUEVOS MODELOS Y RECURSOS TECNOLÓGICOS EN LA PRÁCTICA DOCENTE
RT / TREINTAÑEROS EN CRISIS
RT / JUGUETES PARA TREINTAÑEROS
(2012)
¿POR QUÉ NO FUNCIONA EL MODELO BASADO EN COMPETENCIAS? ELIJA SU OPCIÓN -Primera parte-
¿POR QUÉ NO FUNCIONA EL MODELO BASADO EN COMPETENCIAS? ELIJA SU OPCIÓN
-segunda parte-
menú de preguntas para entrevista a candidato presidencial
amor y soltería
¿una universidad para todos? |